De nuevo el sueño ha partido a media noche en busca de otra cama más cálida. Abandonado entre las sábanas con la única compañía de mis anhelos. Intento pensar en qué soñaba pero me reprimo al recordar que era una pesadilla. Demasiadas horas quedan hasta que salga el sol, y la única banda sonora que puedo escuchar es mi respiración.
...
La llegada del alba ha tardado una eternidad. El tic tac del reloj se ha ralentizado adrede. Tiempo hoy no serás mi aliado. Aunque pensándolo bien, nunca lo has sido. Fuera siento gotas romper en la cornisa. Hoy el día de nuevo será gris y se teñirá de melancolía. Me levanto obligado por el insoportable despertar del resto de vecinos. En el espejo sólo veo ojeras que delatan una breve noche y el imparable paso de los años. Me empapo la cara con agua gélida y casi despierto.
Un café corto, muy corto y sin azucar. Otro cigarro que debería ser el último que invada los pulmones de humo. Miro por la ventana y la mirada se pierde en el verde horizonte hoy borroso por la lluvia...
Me disfrazo con ropas de camuflaje para pasar desapercibido fuera de estas paredes. Lleno una bolsa con libreta, lápiz, cámara y silencio. Listo para salir de mi morada.
Hoy será un día para diambular por calles que aún no conozco, cruzarme con personas que no veré más y disfrutar de la música de la gran ciudad.
Perdiéndose en miércoles.
© TOni CerVera, 2013
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