jueves, 28 de abril de 2016

Així va començar. 28/04/2016.


“Moments que passen tan de pressa que quasi ni els assaboreixes. En realitat saps que sí ho fas, però vols més, molt més. I ho fas tan intensament que sembla que no hi hagi un demà. I abans d’acabar vols que torni a començar. I abans de marxar ja vols tornar. Xerrar i xerrar. Mirar i mirar. Sentir i sentir. És genial, la veritat. Somiar despert, complicitat, afinitat, il•lusió... no es pot demanar gaire més. Exacte, la qüestió és aquesta: no demanar res i gaudir de tot. No pensar en demà, ni tampoc en ahir. Només pensar en ara; i desitjant que no tingui data de caducitat.

L’estrany és que se’t fa molt complicat trobar paraules per expressar el que sents. I mira que se’t dóna molt bé trobar les paraules adients quan s’escau. Però amb ella és diferent; i és que ella és diferent.”

Això ho escrivia tot just un mes després d’haver-la conegut. O millor dit, tot just un mes després de posar-li cara. Feia dos mesos que xerràvem pels descosits. Avui he retrobat aquest escrit en una d’aquelles llibretes que acostumo a perdre i m’ha fet gràcia, molta gràcia. Com pot ser de diferent una vida quan et creues amb algú com ella.


© TOni CerVera, 2016



martes, 26 de abril de 2016

Sky full of stars. 14/06/2014.


Sky full of the stars. Streets full of your shine.

Llevo días con la necesidad, casi enfermiza, de sentir poesía en mis venas. Por un motivo u otro, no hay forma de encontrar aquel flujo de palabras constantes y que tengan cierto contenido. Siempre fui muy ‘Lope’. Siempre fui muy espartano. Eso sí, sin reina ni reino. O eso creía yo. La verdad es que me he dado cuenta que mi reino soy yo y mi reina siempre está ahí. Aunque ahora sea más princesa que reina; y siempre sea así.

A cada paso que damos reestructuramos todo lo que habíamos construido. Aquello que en su momento creíamos inamovible. Demolemos para construir de nuevo. Arrasamos para volver a empezar; pero esta vez con experiencia. Así debe ser, y así lo tenemos que disfrutar. 

© TOni CerVera, 2016


domingo, 24 de abril de 2016

Apunts d'amor. 24/04/2016.


Amor a base de sospirs.
Gemecs de bon dia.
Escalfor de pell nua.
Malabarismes d’habitació.

Temps que no s’atura.
Moments que sumen.
Desentesos que uneixen.
Somnis en construcció.

Portals sense llum.
Dies que són curts.
Riures amb gust de vi.
Pau entre coixins.

Inspiració de carn i ossos.
Transcripcions impossibles.
Imatges que proven dir.
Paraules que no calen.

Musa ben trobada.

A tu, Moni.

© TOni CerVera, 2016

jueves, 21 de abril de 2016

Invictus. Victus. Gratias ago. 20/04/2016.


“Hay guerras que no puedes ganar. Por mucho que te empeñes es así. Pero es nuestro comportamiento en cada una de las batallas lo que nos hace ser lo que somos. Lo que somos en realidad, no lo que creemos ser. Que le pregunten a Leónidas en las Termópilas. Actitud señores, actitud. En un entorno tan hostil como el actual plagado de ‘Goliats’, inmerecidos hijos de estatus y carteras llenas heredadas sin esfuerzo alguno y, casi todos ellos, sin un ápice de piedad, todos somos ‘David’ en una constante lucha por sobrevivir. ¿Es fuerza? Lo dudo mucho. Muchas veces tan siquiera sabes de donde salen esas ganas para seguir adelante. Pero a pesar de todo, ahí están. Más bien es cuestión de valores y principios. Esos que algunos (aún) tenemos y que nos han inculcado, hemos aprendido y hemos hecho nuestros. Observo a mí alrededor y reconozco a héroes y heroínas. De los auténticos, y no a personajes de cómics y ficción, sino de los de carne y hueso que han salido a alzarse y a afrontar cada una de esas batallas que la vida les brinda gratuitamente. Y esos y esas que tanto han perdido y siguen ahí dándolo todo aún sin quedarles nada.

Debemos fijarnos más, quejarnos menos y tomar ejemplo.

¿Qué narices hago yo? ¿Qué narices he hecho yo? Pues simplemente ser fiel a mí mismo. Sí, eso es; y a quien no le guste, dos piedras. Sudor y lágrimas. Muchísimas lágrimas y mucho sudor frío. Ese será mi pobre legado a los que vienen detrás: no rendirse, no empequeñecerse, tener valores, luchar por los sueños, seguir adelante y saborear la vida.

Gracias. 

A ti, mi pequeña hermana. Por enseñarme tanto. Por darme ejemplo. Por hacer del mundo un lugar mejor. Por animarme. Por apoyarme. Por contagiarme de tu sonrisa a pesar de lo que te ha tocado vivir. Por estar cuando nadie más ha estado. Por ser mi confidente. Gracias.

A ti mi pequeña princesa. Por ser esa luz en la oscuridad. Por ser la inocencia incorrupta en un mundo podrido. Por enseñarme lo que es el amor incondicional. Por aguantarme. Por alegrarme cada día. Por abrazarme de esa manera. Por mirarme con esos ojos. Gracias.

A ti mi hermano, y a ti mi hermana. Por empujarme cuando hacía falta. Por echar ese cable cuando todo estaba roto. Por distraerme de la realidad. Por no juzgar y no preguntar. Por las risas. Por acompañarme. Por estar ahí. Gracias.

A vosotros mis padres. Que aunque no lo sepáis, mucho habéis hecho para inculcarme (inculcarnos) todos esos valores. Gracias.

A los que están y a los que han estado. A los que estuvieron y ya no están. A los que estarán. Gracias.

A mí. Porque a pesar de todo, siempre valió la pena llegar hasta aquí.”


Todo esto lo escribí un 8 de septiembre de 2015. Hace relativamente poco, pero al mismo tiempo parece que hace una eternidad. La relatividad del tiempo, que dicen. Hoy lo he buscado y rescatado de una de las libretas. He vuelto a ese lugar llamado CMAC, pistoletazo de salida de nuevos (aunque viejos) procesos judiciales. He recordado sensaciones, nervios, intranquilidad y malestar. Pero sólo he recordado esas sensaciones. Esta vez estoy muy tranquilo, muchísimo. Es mucho lo que he aprendido como para alterar mi paz por esas memeces. Una historia terminada con flecos interminables.

Valió la pena, por supuesto que valió la pena. Siempre vale la pena.


© TOni CerVera, 2016

miércoles, 20 de abril de 2016

En el metro. 26/05/2014.


Pocas veces sube uno al metro y encuentra a alguien escribiendo. A escribir en papel me refiero. Es algo raro de ver hoy en día. Pelo de color naranja, o mejor dicho, de un rojizo caoba en sus puntas degradando hasta llegar a un anaranjado chillón cerca de sus raíces. Ojos rasgados color cielo transparente. Piel clara casi nieve sin maquillaje. Rasgos perfilados como escuadra y cartabón. Libreta cuadriculada y bolígrafo bic negro. No observa a su alrededor, sólo escribe.

Yo sí observo mi alrededor a la par que escribo. Sólo caras pegadas a los móviles.

La “conectividad” de esos dispositivos, sin los que la gran mayoría no sabemos vivir, nos aísla cuál náufrago en medio del océano. Una diminuta pantalla, también conocida como la ventana que nos muestra y conecta al mundo, que resulta ser no más que una herramienta de autoaislamiento. A mí me recuerda a las anteojeras que se ponen a los equinos. Tampoco nos dejan ver lo que hay a nuestro alrededor.

Son viajes cortos. El metro no da para más. Pero lo suficientemente largos como para escribir unas cuantas líneas que después puedan ser algo más. Un apunte de ideas, un esbozo de reflexiones, un resumen de pensamientos. Siempre da, ese breve tiempo, para algo más. Pero supongo que es mucho más fácil no pensar, y dejar que esa, muy nuestra, pantalla piense por nosotros.

Esta tarde me invadía la pereza. Ahora me invade una cierta alegría por las sinergias en las que me he encontrado inmerso. Ya es seguro: absolutamente todo me marca una única dirección. Pisadas firmes y llenas de energía que me hacen recorrer, de nuevo, un camino que hace tiempo abandoné.

© TOni CerVera, 2016





miércoles, 13 de abril de 2016

És fàcil despistar-se pels carrerons. 11/02/2014.


Rambla del Raval. Sol que no escalfa a l’ombra d’un arbre. Terrasseta i cafè sense sucre. Cap dispers entre pensaments que van i venen. Al ben mig d’un huracà intern. Full en blanc i punta fina negre. Frenesí d’una ciutat que no s’atura mai. Tot just arrenca la Condal. I sents pau enmig d’aquest semi caos. Casualitats i causalitats. Visionar i fer-se realitat. Pas a pas ferm i, encara que a moments distret, segur de cap a on vas i on no et vols quedar.

Fa un temps que no saps d’on treus les forces; però encara et sobren. Aire fresc t’acarona, senyal que quelcom està succeint. Saps que el teu camí el fas tu i només tu. Ja no recorres part del que has transitat. Un preu relativament car, però ben pagat.

Tot passejant per carrerons desconeguts, res et sembla nou. Quan vas sense pressa, els detalls prenen protagonisme. Finestres, façanes, portes, racons... tot es magnifica. Detalls que construeixen records. Records que et transformen poc a poc.  I saps com t’agrada perdre’t per llocs desconeguts a la descoberta de més detalls.

Avui he recordat la d’hores i hores que he passat recorrent llocs que no coneixia a ciutats de països quasi desconeguts. Acabo d’arribar a una placeta en forma de jardí amagat i emmarcat per edificis al mig del barri. Ebullició hormonal en un ambient universitari. Facultat de periodisme crec, plena de ments curioses i mal•leables. Combinació de tranquil•litat i converses sordes per tot arreu. Quasi un ambient equilibrat per algú que només observa. Recordes quan eres jove; encara que ara t’hi sentis les sensacions eren ben diferents. Recordes també que allà on vagis sempre fas visita als campus universitaris, abans que a museus i biblioteques. No saps perquè, però són uns llocs que se’t fan molt agradables. Potser és la barreja de normes, llibertat, innocència, ideals i coneixements que es respira. ‘La Massana’; a la sortida veig una placa amb el nom.

Jo també em passava hores al campus imaginant i projectant una vida que va resultar ser força diferent. No pitjor, que consti. Temps fugit. Vivències que no es repeteixen. Experiències que evolucionen l’ànima. El que llavors vas ser, ja no has tornat a ser. Ara ets una versió millorada; com el vi, el bon vi. Almenys així ho sento. Però la base va ser sempre aquella.

Seguim passejant.

© TOni CerVera, 2016